Cómo curar las heridas del divorcio – El camino del vidente

Si eres como la mayoría de la gente, has pasado por al menos una ruptura importante en tu vida. Y para algunos de nosotros, esa ruptura fue especialmente dolorosa. El divorcio es una parte muy real de la vida moderna y, por mucho que lo neguemos, nuestras relaciones personales van a sufrir reveses con el paso del tiempo. Todos hemos pasado por ello: Estás con esa gran persona y de repente decide que ya no siente lo mismo por ti. Es una mierda y nos pasa a todos. Pero, ¿qué pasaría si pudieras hacer cambiar de opinión a ese antiguo galán y recuperarlo? ¿Y si pudieras usar tus habilidades de vidente para ver su futuro y ayudar a guiarlo de vuelta a ti? A nosotros nos suena a magia. Pero aunque el divorcio puede ser extremadamente difícil, no tiene por qué ser una pérdida total en todos los casos. De hecho, utilizar el poder de la videncia puede ser muy curativo para los implicados. He aquí cómo: . .

Mira más allá de lo obvio y de los errores del pasado.

Lo primero es lo primero: tenemos que ir más allá de lo obvio. No nos referimos a las preguntas “por qué”. Sabemos que surgirán y las tratamos de frente en los siguientes pasos. Nos referimos a lo que vemos y a cómo lo interpretamos.

He aquí algunas cosas que quizá no hayas tenido en cuenta:

  • Puede que los motivos de la división no estén del todo claros para ti. Tal vez una persona pensaba que le iba mejor económicamente y la otra se sentía atrapada. O tal vez una persona se sentía poco apreciada y la otra se sentía abandonada. Lo importante es que ambas personas sentían algo. Y aunque una de las personas haya sido la que ha hecho la negligencia, la otra podría haber sido la que se sintiera descuidada.
  • A veces las personas se retraen cuando están en una relación. Puede ser que una persona se retire porque no está contenta con cómo van las cosas y la otra persona está siendo demasiado amable. O puede que una persona se retire porque no sabe cómo decir “te quiero” y la otra no sabe cómo responder. Sea cual sea el motivo, la retirada de la otra persona se manifestará como una falta de interés en la relación.

Evita alimentar el lado oscuro de tu psique

Ahora, sé lo que estás pensando: “¿Pero qué pasa si sólo está siendo un mal novio? ¿Y si sólo quiere terminar la relación para poder estar solo y superar su última pérdida?” Bueno, es una pregunta muy razonable. Pero el problema es que no puedes saberlo con certeza hasta que lo preguntas. Los malos novios existen. Pero según los expertos, sólo el 10% de ellos está dispuesto a admitirlo. Y el resto tiene demasiado miedo de que les tachen de ex novia o novio loco. Así que no quieren hablar de ello. Por eso hay que mirar detrás de los errores obvios del pasado y ver qué está pasando dentro de cada uno que puede estar causando problemas a esa persona en primer lugar.

Recurrir a una fuente de energía más positiva

Todos tenemos diferentes dones y talentos, y para algunas personas, leer el futuro es parte de su don. Pero para muchos de nosotros, cuanto más negativa es nuestra energía, más atraemos. Así que, en lugar de centrarnos en lo que no tenemos, ¿por qué no intentar ver lo que tienes que falta en tu vida? Por ejemplo: ¿tus relaciones pasadas? Intenta ver si hay algo que puedas hacer para cambiarlas. ¿Tu educación? Intenta cambiarlo. ¿Tu carrera? ¿Tu salud? Intenta cambiar eso.

Usa un toque curativo

Cuando te centras en lo que no tienes, atraes lo que no quieres. Y a menudo, la persona en la que te centras no quiere nada contigo. Así que en lugar de darle a esa persona espacio y tiempo para que descubra lo que quiere, te pasas todo el tiempo atrayendo a personas que no quieren estar contigo, o que simplemente no responden a tus mensajes. Así es como acabamos en la zona de amigos:

  • No das a nadie espacio para ser ellos mismos. Te preocupas demasiado por lo que piensan los demás y no permites que nadie sea quien es.
  • Presionas a los demás para que encajen en tu idea de lo que deberían hacer y ser. Les dices que se callen, que se apaguen y que sean felices con lo que son.
  • No permites que nadie sea él mismo.

Conclusión

Divorciarse no tiene por qué ser el fin del mundo. De hecho, usar el poder de la clarividencia para ayudar a tu ex pareja en este momento difícil puede ser extremadamente curativo para ambos. Sólo tienes que saber cómo utilizar el don de la clarividencia.

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