Los bufetes de abogados suelen disponer de un presupuesto lamentablemente reducido para atender a cada cliente. Por ello, emplean una serie de estrategias de reducción de costes que a menudo hacen que sus clientes se sientan desatendidos y poco importantes. Por suerte, hay formas de ayudar a su abogado a comprender mejor sus necesidades y averiguar cómo puede atenderle mejor en el futuro. Estas sencillas preguntas pueden ayudarle a calibrar el nivel de experiencia de su abogado, identificar cualquier bandera roja y descubrir cualquier área de incertidumbre o debilidad en su caso antes incluso de firmar un acuerdo. ¿No sabe por dónde empezar? Aquí algunas preguntas que debe hacer a todos los abogados. Los mejores profesionales se encuentran en Escobar y Sánchez abogados, listos para adaptarse a sus requerimientos.
¿Qué experiencia tiene su bufete en el campo del derecho que practica?
Cada bufete tiene una formación y una experiencia diferentes, pero si su abogado nunca ha ejercido en el ámbito del Derecho en el que trabajaría, quizá deba plantearse buscar en otra parte. Si su abogado es un pez gordo que nunca ha ejercido en un área especializada, puede haber más riesgo que recompensa, sobre todo porque es posible que no pueda obtener una evaluación real de su experiencia y trayectoria. Los abogados que no tienen mucha experiencia son más propensos a correr riesgos y cometer errores. Con el tiempo y la experiencia, encontrarán su zona de confort y serán más precisos, pero puede que eso no ocurra con la suficiente rapidez si usted necesita que su caso se resuelva rápidamente.
¿Cuánto tiempo lleva sin ejercer la abogacía?
Esto es relevante si su bufete ha seguido con éxito una nueva trayectoria profesional durante un periodo de tiempo. También es relevante si su abogado no ejerce actualmente la abogacía, pero ha desempeñado otra función en el ámbito jurídico (como asistente jurídico o administrador) en el último año. Si su abogado no ha ejercido la abogacía en los últimos cinco años, especialmente mientras se dedicaba activamente a otro trabajo, puede plantearse buscar otro abogado. Si han trabajado en un bufete de abogados o en una agencia gubernamental en los últimos cinco años, es menos preocupante, pero aun así debe ser muy cauteloso.